El precio medio de la vivienda nueva y usada se ha situado en 1.303 euros por metro cuadrado en el tercer trimestre de 2015, con lo que experimenta un descenso interanual del 0,5%, aunque aumenta 1,4% si se compara con el trimestre anterior. “El precio medio de la vivienda encadena diez trimestres consecutivos de estabilidad, con ligeras oscilaciones al alza y a la baja, en forma de dientes de sierra”, recoge el informe trimestral Tendencias del Sector Inmobiliario, elaborado por ST Sociedad de Tasación.
El precio medio acumula así un descenso del 45,7% respecto al valor máximo que alcanzó en 2007, cuando se situó en 2.401 euros por metro cuadrado.
El número de años de sueldo íntegro que un ciudadano medio necesita destinar para la compra de una vivienda de tipo medio se ha situado en el cuarto trimestre en 7,4 años, manteniéndose estable con respecto al trimestre anterior. Este indicador se calcula a partir del cociente entre el valor de mercado de la vivienda y los ingresos medios brutos anuales que publica el INE en su encuesta anual de estructura salarial.
Este dato no varía con respecto al trimestre anterior. Además, se ha reducido prácticamente a la mitad si se compara con los 13,7 años que eran necesarios en 2007, el año en el que los precios estaban más altos.
Según ST, continúa creciendo la actividad en el sector inmobiliario, tanto en volumen de transacciones como en la reanudación de obra nueva detenida durante los últimos años, si bien dicho crecimiento no es uniforme en el territorio. Se aprecia también mayor fluidez en la formalización de operaciones hipotecarias.
En su análisis del índice de confianza la tasadora concluye su tendencia al alza, subiendo casi dos puntos en un trimestre, hasta los 51,1 puntos. Supera por primera vez la posición neutral de los 50 puntos y continúa el crecimiento progresivo del índice observado durante los últimos dos años, desde el mínimo que registró en el último trimestre de 2012, con 30,6 puntos. La mejora durante los últimos diez trimestres consecutivos parece confirmar la tendencia a la evolución favorable en todas las comunidades autónomas, especialmente en la Rioja (55,4), Baleares (55,3) y Asturias (53,5). Aragón, Castilla y León y Murcia, son las únicas en las que el índice se sitúa aún por debajo de los 50 puntos.